El 19 de octubre de 1987 los mercados bursátiles de todo el mundo se desplomaron en unas horas horas. Las hostilidades en el Golfo Pérsico, la aceleración derivada de un proceso de computerización transaccional y el miedo a la subida de los tipos de interés suelen citarse cono causas inmediatas de un efecto dominó que comenzó en Hong Kong y acabó arrastrando al Dow Jones hasta la mayor caída de su historia: un 22,6% en una sola sesión.
Esta original serie de ficción que estrena Movistar+ nos cuenta cómo un grupo de ‘outsiders’ de las finanzas se colaron en 1986 en el exquisito club de los más selectos de Wall Street.
Black Monday
Todo es ego, pasta, hombreras y cocaína en el Wall Street de 1986. Esta es la historia de cómo un grupo de ‘outsiders’ de las finanzas se colaron entre los peces gordos de la Calle 42 y se cargaron el mayor sistema financiero del mundo (además de una limusina Lamborghini y el techo de cristal, literalmente…).
Mo, Dawn y Blair forman un trío atípico. Unidos por el trabajo duro, la suerte y, sobre todo, el deseo de ganar mucho dinero, no son precisamente los más exitosos de la Calle 42. Pero nunca se debe subestimar a un perdedor. Como recién salido de una marmita de coca, Mo habla mucho, rápido y mal, pero cuando abre la boca no da puntada sin hilo. Dawn es su alter ego, pero es mujer y afroamericana y, claro, estamos en los 80, así que prácticamente toda su energía la invierte en demostrar que vale para esto. Blair es un cerebrito con cara de no haber roto un plato, también el hombre perfecto para la hija de un inversor. El único ¿problema? es que es gay.
Los tres forman un equipo imbatible, hasta que unas cuantas decisiones absurdas y una buena dosis de ego herido se lo carga todo a niveles que ni ellos esperaban.
Una serie que cuenta con un cierto humor negro lo que ocurrió en esos aciagos días. Una serie que se estrena la madrugada del 20 al 21 de forma simultánea a Estados Unidos.